A este pezqueñajo lo conocísteis cuando lo compré en Agosto. Una pequeña calabacita preciosa.
Hace unas semana me sorprendió con un capullo. Yo miré y decían que tardaban en florecer mucho. Por eso, mi bonete de obispo (astrophytum myriostigma) aún no ha florecido.
Pero este pezqueñín, me ha dado la gran sorpresa (seguro que es de Bilbao, pequeños pero matones) y ha sacado esta hermosísima flor, de la que estoy encantadísima y todo lo acabado en ísima y bueno.
Las primeras fotos están tomadas ayer tarde y las últimas esta mañana. La luz de la tarde da un color más amarillo y más cálido. La luz de la mañana, da nitidez y se ve la preciosidad de esta flor, que, además, huele bien.
Disfrutadlas
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